miércoles, 29 de junio de 2011

Para Ana (de tu muerto)

Debería ser fácil empezar a escribir mi opinión, a fin de cuentas es sólo eso: una opinión. Pero para mi no lo es. Sí, demasiado perfeccionista...

Hace unos meses, una amiga me presto la segunda parte de "Perdona si te llamo amor" (Federico Moccia). Había leído la primera parte - también me lo prestó - y me apetecía saber como continuaba. A los pocos días de recibirlo, lo comencé.
A día de hoy sigue estando apartado en mi estantería con una marca por dónde llevo leído, y a pesar de tenerlo ahí esperando que vuelva a cogerlo - no me asusta su grosor, he leído de similares -, por casualidad - cosas del destino - descubrí el twitter personal de Nuria Roca y con el lo que contenía su pagina web. Ese día de algún modo todo cambió.

Me llamó mucho la atención la portada del libro que vi publicado nada más entrar en la web. Reconozco que desconocía esa faceta suya, y por una extraña razón ¡me alegré!
A parte del shock del título del libro "Para Ana (de tu muerto)" al momento me recordó al libro que leí hace años de Cecelia Ahern "Dónde termine el arco iris", luego pasé a leer el argumento y de ahí a decir: "Tiene que ser mío".
Desde un principio me transmitió muy buenas vibraciones. La portada, el título, el argumento... dicho exageradamente: Tuve un flechazo con el libro - y no es la primera vez-.

Al comienzo, como con todos los libros - excepto que sea una segunda, tercera, etc. parte - cuesta ubicarse, pero no tardas en situarte. Luego, una vez hayas pasado de los tres primeros capítulos y veas las primeras pinceladas de la historia, vas a ser incapaz de querer soltarlo de tus manos. Yo no pude, me hizo vulnerable. Y añadiría arisca o borde, ¿por qué? Mi personalidad no es borde, ni mucho menos, sólo que odio - y se que es una palabra fuerte - cuándo alguien empieza hablarme o a preguntarme cosas que en ese momento no quiero oír. Es como si alguien cogiera una aguja, pinchara la burbuja y me cayera al suelo sin tiempo a reaccionar. Necesito tranquilidad, silencio... cuando disfruto de un buen libro, cualquier ruido insignificante me molesta (hay excepciones). Por alguna razón muchas veces prefiero leer de noche o cuando no hay nadie en casa. Sólo que esta vez no pude esperar a que se hiciera de noche.

"Siempre decía que lo único que realmente hay que tener claro es el personaje principal. Hay que conocerle en profundidad, saber cómo es, en qué momento está y todo lo que hay en él que no se ve. El personaje es lo más importante que hay de una novela, lo que le pase es secundario."

Éste es uno de los fragmentos, entre otros anteriores que se me olvidó anotar, que captó mi atención. Cuándo lo leí me sacó una sonrisa. Al igual que alguno de los personajes del libro o simples nombres que se mencionan, escribo, pero por ahora es más afición que profesión aunque nunca digas nunca. Supongo que por eso de algún modo me sentí parte de la frase.

"Recordando el brillo de mis zapatos granates, creo que aquella mañana en el parque descubrí que las cosas que realmente quieres mucho duran demasiado poco. Y lo peor es que fui yo quien los destrocé sin darme cuenta."

Ahí tenéis otro fragmento culpable de sacarme una sonrisa, y ahora que vuelvo a leerlo me emociona porque miro más allá de un simple fragmento de novela. Es inevitable, a veces hay pensamientos que renacen leyendo algo que probablemente no tiene nada que ver.

" << tenemos jamón, patatas bravas, un poquito si queréis de paella, boquerones en vinagre o fritos, que los acaban de freír, calamares a la romana, pulpo a la gallega, o un poquito de tomate con ventresca si preferís >>."

Imaginaros leer esto, sobre las 21:40 de la noche y sabiendo que tienes hambre, pero el libro te tiene tan abducida que eres incapaz de soltarlo para comer. ¡Una tortura! lol.

Por último, un fragmento que había elegido para empezar a escribir, pero también lo veo adecuado para terminar.

"Esta noche no he dormido apenas porque empecé una novela y no fui capaz de parar hasta que terminé de leerla."

Ésta frase me define. Habría que cambiar "noche" por tarde y "dormir" por cenar, pero a parte de esto, ¡esa soy yo!

Me siento feliz de haber sido una más en conocer éste libro y de haberlo leído. Me hizo pasar una tarde de Miércoles increíble. Me entregué por completo a él y no me arrepiento.
No ha sido leer un libro, también conocer un poco más el mundo de la editorial y todo lo relacionado a ello. Lo he disfrutado en muchos sentidos.

¿El final? Sólo una palabra: ¡Sorprendente!
Si crees que todo se a terminado, ese final y las conclusiones que debes sacar de él - yo lo hice- te deja con un "¡Guau!" en la boca.

A diferencia del anterior post, dónde califiqué las distintas historias de ese libro, con este no puedo hacerlo. Sería injusto ponerle un nuevo o un diez. Perdonadme. Soy incapaz de poner un número a un libro que captó mi atención a los cinco minutos de saber de él.

Pd: Me parece que habrá que hacer otra visita a la librería a ver si tienen"Los caracoles no saben que son caracoles" (;


RLW - Sori -

1 comentario:

Ire dijo...

Si te ha gustado PAra ana, de tu muerto los Caracoles te van a encantar!!!